martes, febrero 2

Magia en tu Vida!

Es necesario llegar a comprender la manera como una persona aspira a ciertos ideales.
El teatro el cine, la televisión, la radio y las novelas funcionan sobre el terreno de la ficción.
La lucha libre es un espectáculo donde los malos siempre están a punto de vencer a los buenos con trucos y formas sucias; sin embargo los buenos casi siempre ganan al final. Esto es porque el público así lo quiere.

La idea de que pronto llegara Santa Claus, o los Reyes Magos hace que los niños pasen una velada maravillosa.
El pequeño descubre el bate o la pistola de juguete en el lugar donde no había nada antes. Nos hace como niños, sentir una emoción de alegría indescriptible. Por otra parte los adultos van perdiendo, con la edad, esa maravillosa capacidad para imaginar, esa maravillosa capacidad para imaginar.
Quizá la ficción sea la sustancia que debemos agregar a la vida. Aquel que logra demostrar que lo suyo es real, es quien más se divierte y divierte a los demás. Sé que una existencia sin una cubierta de ficción es tediosa y posiblemente insoportable. Creo que el castigo por madurar es la perdida de ese mundo de magia duendes y héroes.

Estoy convencido de que el estado de ánimo se mantiene elevado en proporción a la magia que nos rodea. Cuando los ideales se pierden, cuando ya no podemos creer que existan cosas sobrenaturales, es entonces cuando la “verdadera realidad” nos aplasta, con sus malas noticias y preocupaciones.

La única manera de mantener la magia en nuestra vida, es creer en algo, es tener un ideal que siempre podamos mantener enfrente de nosotros.
Cuando puedas creer nuevamente en los cuentos de hadas, podrás recuperar la magia que un día existió. Existe una realidad aparente dentro y fuera de las cosas, pero hay una realidad superior y esta yace dentro de ti. Esta realidad eres tú mismo.

La ilusión y la ambición están compuestas de sustancias de un valor por encima del oro y de los diamantes. Son lo que sostienen la estructura de la vida y son la verdadera esencia del ser.
Sin ilusiones y sin ambiciones no hay nada por que luchar y es lo mismo que estar muerto. Si uno vive para obtener y sin nada que lograr, la existencia no tiene sentido.

Cuando te convenzas que no se puede mover un objeto a distancia con solamente pensar en ello, habrás perdido tu capacidad para creer.

Cuando ya no puedas creer en ti mismo, habrás muerto. y que Un ser humano no vale tanto por lo que tiene sino por aquello que anhela con todo su serestá plenamente convencido en poder obtener.


ERES TAN GRANDE COMO TUS ANHELOS.






By : Carlos González( del libro Rutinas Practicas)